Es muy fácil caer en la monotonía con respecto a nuestra sexualidad de pareja. Nuestro cerebro se acostumbra a lo mismo de siempre y lo que hacemos deja de estimular como sucedía al principio. Por eso necesitamos estar generando variedad y experimentar nuevas formas de disfrutar nuestra intimidad sexual.
Cantares 7:12-13 NTV Levantémonos temprano y vayamos a los viñedos para ver si brotaron las vides, si ya abrieron las flores, y si las granadas están en flor. Allí te daré mi amor. Allí las mandrágoras dan su aroma, y los mejores frutos están a nuestra puerta, deleites nuevos y antiguos, que he guardado para ti, amado mío.
Para probar "deleites nuevos" necesitamos dar espacio a la experimentación. A veces es muy difícil atrevernos a proponer lo que deseamos intentar al momento de tener relaciones sexuales por miedo a lo que nuestro(a) esposo(a) pueda pensar de nosotros; por eso creamos este RETO DE INTIMIDAD SEXUAL para ayudarles a platicar sobre este tema y descubrir lo que realmente sienten sobre algunas prácticas sexuales, y a la vez inspirarlos a intentar cosas nuevas que reenciendan la aventura en su matrimonio.
Tal vez algunas de estas cosas ya las practican, pero enfóquense en las que hace mucho que no hacen, o que nunca han hecho.
Como deseamos que nuestro matrimonio sea sexualmente vibrante, pero moralmente puro, intentamos cosas nuevas dentro de los siguientes límites establecidos por Dios para nuestra sexualidad:
1. Que surja del amor y el deseo y no de la perversión. Evitamos lo que venga de nuestra corrupción moral, y que nos haga sentirnos viles, humillados, usados o culpables
2. Que sea sano. Evitamos lo que sea insalubre, hiriente o dañino para el cuerpo, el alma o el espíritu.
3. Que sea voluntario. Evitamos lo que tengamos que forzar o presionar a nuestra pareja a hacer.
4. Que sea exclusivo entre el esposo y la esposa. Evitamos compartir nuestra intimidad con nadie, así como consumir pornografía, o incluir a otra persona.
5. Que no genere dependencia. Evitamos usar cosas o consumir estimulantes que después nos hagan imposible disfrutar de la intimidad sin ellos.
6. Que no reemplace a nuestro(a) esposo(a). Evitamos sustitutos como la masturbación o los juguetes sexuales que simulan órganos sexuales.
Tal vez algunas cosas que intenten terminen por no gustarles tanto como esperaban, pero seguramente encontraran otras que les guste mucho. El punto es salir de la rutina y disfrutar juntos de la emoción de lo nuevo.
Como no es fácil platicar de estos temas, los retamos a realizar nuestro ejercicio para compartir las cosas nuevas que estamos dispuestos a intentar en nuestra intimidad sexual.
En nuestro Podcast Indivisibles Ep. 109 Variedad y Experimentacion en la intimidad, hablamos a mayor profundidad sobre este tema.